Ubicada en medio de la vegetación, casi invisible para cualquiera que la vea desde la calle, se esconde una joya de la arquitectura moderna brasileña. En el barrio paulista de Jardim América, la Casa Zalszupin diseñada en 1960 por el arquitecto polaco radicado en Brasil, Jorge Zalszupin, combina rasgos del modernismo local con influencias que el arquitecto trajo consigo de Europa, en particular de la arquitectura escandinava.
La casa terminada en 1962 fue diseñada para el arquitecto y su familia, quienes vivieron allí durante casi 60 años. Además del programa residencial, también albergaba la oficina de Zalszupin, un gran espacio con una mesa de conferencias y un tablero de dibujo que parece haberse mantenido intacto desde la muerte del arquitecto en agosto de 2020.
Los muros internos tienen una textura suave, un poco rugosa, que reduce la aspereza del blanco y hace agradables los espacios, aptos para recibir la vida y la historia de sus habitantes. Pisos de cerámica rústica, paredes de piedra, escaleras de palisandro y vidrios de colores en las ventanas ayudan a componer este espacio de vida doméstica tan moderno como brasileño.
Fotografiar esta casa fue una experiencia única. No se trata solo de documentar la arquitectura, hay un aspecto narrativo para fotografiarla: la casa como una ventana a la esencia del arquitecto y diseñador. — Paul Clemence
En 2020, ETEL, empresa responsable de la reedición de los muebles de Zalszupin, transformó la casa en un espacio cultural que busca proteger la colección y expandir el legado del diseñador a través de exposiciones, conferencias, clases e investigaciones.